top of page
pexels-larissa-farber-7891908_edited.jpg

Ayuda profesional

Lo primero que tienes que tomar en cuenta es entender cómo funciona el sistema de salud del lugar donde vives para saber que está a tu alcance. En algunos países la medicina es gratis o subsidiada, en otros es completamente privatizada. Los dos escenarios tienen pros y contras, por eso hay que considerar todas las opciones.

 

Si estás interesada en la medicina convencional puedes acudir a tu doctora de cabecera, endocrinóloga, o ginecóloga. Si quieres explorar la medicina integral, o alternativa puedes consultar a doctoras naturópatas, homeópatas, nutricionistas, profesionales especializados en hierbas medicinales, etc. Hay una tercera opción que es relativamente nueva y que está disponible sólo en algunos países que es la de los doctores funcionales, quienes combinan la medicina convencional con la integral. 

 

Otro flanco diferente y muy importante es la ayuda a nivel emocional y psicológico porque no sólo trata a este nivel, sino que repercute positivamente en la salud física también. Entre los profesionales de éstas disciplinas están las psicólogas, psiquiatras y psicoterapeutas, quienes ofrecen consultas privadas y talleres en grupo.

 

Un factor crucial es la disponibilidad económica que tienes para realizar todas estas consultas, exámenes de laboratorio, y todo lo que necesites para tu tratamiento. Si tienes un presupuesto ajustado, yo te recomiendo que veas primero lo que puede ser gratis o subsidiado en el país que te encuentras. En el caso que cuentes con un seguro de salud privado, ves qué cubre y que tienes que pagar por tu cuenta. Lo ideal es que escojas las opciones que puedas sostener en un tiempo prolongado. Luego puedes reorganizar tu presupuesto para que haya cabida a otras alternativas que sean más costosas, pero que quizás sean las que más se alinean con tus creencias y tu estilo de vida.

 

En cuanto al tiempo, ya que posiblemente tengas una vida ocupada, la mayoría de los profesionales de la salud hoy en día ofrecen mucha flexibilidad y recursos como por ejemplo las consultas en línea y llamadas que pueden ser durante el día, de noche, o los fines de semana, facilitando enormemente la disponibilidad y el tiempo para hacerlos. Lo importante es que tomes acción y no te quedes esperando a ver si mejoras por ti misma. El proceso de la menopausia puede ser muy largo y no vale la pena transitarlo sintiéndote mal cuando hay opciones que puedes intentar.

bottom of page